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NACE una nueva educación: Neuroeducación

por Oscar Malfitano Cayuela (CEO de Alta Gerencia Internacional)












por

Oscar Malfitano Cayuela

CEO de Alta Gerencia Internacional

Disruptive Management , Speaker Internacional







Formalizando la educación no formal y la informal.

Neurociencias Aplicadas en Educación

Inteligencia Educativa


La pandemia global, nos obligó a incorporar definitivamente la tecnología digital en el proceso de enseñanza y aprendizaje, la mayoría de las personas y de las organizaciones, con preparación o sin ellas, debieron recurrir en forma instintiva, impensada y espontánea al uso de los software existentes para con ello, cumplir con una de las claves de la vida personal y de la empresaria: la comunicación.

Hemos integrado inconcientemente una tríada producida por Netfix y Disney, en la que hemos recortado y pegado, pedacitos educativos de la Familia Ingals, Al Maestro con Cariño y de la Sociedad de los Poetas Muertos, que bajo el lema de “Carpe Díem” se anima a aprovechar el momento presente sin esperar el futuro, con música de los Auténticos Decadentes de fondo, cantando “ hoy no voy a trabajar, no voy a estudiar”, cuyo loable fin de educar utilizando instintivamente la tecnología tiene como resultado hasta el momento una educación del entretenimiento hogareño.

Porque aquellas personas, docentes, organizaciones e instituciones educativas que detentaban la tecnología y no hacían un uso eficiente de ella, comenzaron un rápido y natural proceso de aprendizaje técnico del uso de las herramientas disponibles para sobrevivir mejor durante la cuarentena global.

Los múltiples ejemplos que hemos presenciado y convivido de quiénes no se adaptaron a esta imprevista situación que originó un cambio abrupto y disruptivo en materia de comunicación, me lleva a pensar que hemos dado un paso obligado pero agigantado que venía demorado por lo menos, más de dos décadas.

El gran profesor y escritor de ciencia ficción Isaac Asimov, en 1988; en el siglo pasado, decía lo siguiente, en un reportaje que transcribo en forma reducida: “en un futuro habrá bibliotecas conectadas a computadoras, dónde cualquier persona, podrá hacer preguntas y tener respuestas con materiales de referencia; de cualquier tema en el que esté interesado de aprender; cualquiera que tenga interés podrá hacerlo desde su casa, a su propio ritmo, su propia dirección, su propio tiempo, entonces todo el mundo disfrutará de aprender; las computadoras no deshumanizaran la educación, por primera vez tendremos la oportunidad de aprender “uno a uno” entre la fuente de la información y quien la consume…,habrá la posibilidad de “uno a uno” para muchos, todo el mundo podrá tener un maestro y una forma de acceso a los conocimientos acumulados de la especie humana, cada estudiante tendrá su escuela privada y será el quién elija que es lo que va a aprender; irán a la escuela por las cosas que tienen que saber, el conocimiento común que lograrán en la interacción con otros estudiantes y profesores”

El entrevistador le pregunta: ¿Esta nueva forma de educación es solo para los jóvenes?

“No, no, este es un excelente punto, este es un problema que estamos teniendo con la educación, que es para los jóvenes y que la educación tiene un final y no es así, porque cualquier persona, a cualquier edad, podrá aprender por sí mismo, si es que tiene interés en aprender, no hay motivo entonces de no hacerlo, si es que disfrutas de aprender; las personas si tienen interés nunca dejan de aprender, la edad no importa”

Quiénes deseen sorprenderse con esta entrevista que tiene más de 30 años, pueden verla en:






Hoy esta supuesta ficción es una realidad percibida universalmente.

Desarrollo a continuación vivencias educativas cuya cualquier similitud con mi realidad no es pura coincidencia, desde el año 1999 a la fecha, he transitado todos los roles del nivel de educación superior, carácter de docente, profesor, director desarrollador de carreras, rector y evaluador de propuestas educativas, tanto en la modalidad de educación presencial y a distancia, la velocidad del cambio del sistema educativo a través de las normas de regulación y de la falta de visión de quiénes dirigen este sistema, demoraron inconcientemente la incorporación de la tecnología al desarrollo del proceso de enseñanza y aprendizaje; la pandemia nos sorprendió a todos y también afectó al sistema educativo, pero lo afectó en forma positiva, porque atacó a todas las personas sin importar edad o sexo, profesión, o jerarquía.

La educación informal que manifestaba Isaac Asimov, que incluía actividades educativas no estructuradas y azarosas, que no atiende procesos o reglas pedagógicas y que aparentemente no tiene intervención de la ciencia de la educación, se integró con la educación no formal o extra escolar, que incluye actividades educacionales fuera del contexto formal, que contempla recursos formativos amplios y colectivos, dirigidos a la población, formalizando de esta manera la educación no institucionalizada por las normas vigentes, este proceso se suma a la ecuación formal que se imparte en centros o instituciones educativas, con enseñanzas regladas para cada nivel, con la unicidad, uniformidad y rigidez establecidas en las estructuras y criterios normatizados.

Festejo personal y profesionalmente este salto cuántico educativo, aunque ello haya puesto de manifiesto múltiples desigualdades y que además nos muestran el atraso del sistema en su conjunto, evidenciado entre otros en las siguientes desniveles de inter relación

  • Miopía del sistema educativo.

  • Miopía de instituciones educativas

  • Limitaciones tecnológicas y/o económicas

  • Docentes no capacitados

  • Docentes no deseosos de aprender las nuevas tecnologías.

  • Alumnos no capacitados

  • Personas sin la tecnología disponible.

  • Alumnos con mayor conocimiento tecnológico que los docentes.

Lo que si estaba a disposición era el desarrollo software de aplicación destinados a la educación, algunos de ellos gratuitos y desarrollados desde hace muchos años, lo que estaba atrasado era el modelo mental del sistema educativo, que ignoró parcialmente a la inteligencia tecnológica que nos permite desarrollar la capacidad de aprender, entender, razonar, formar ideas de una realidad perceptual; a través de la adquisición del conocimiento por medio de la aplicación de los conocimientos disponibles, necesarios para aprender.

También podemos deducir que para el caso de que hubiera habido inversión en software y hardware tecnológicos, la misma todavía no arrojó adecuados resultados porque se minimizó la inversión en “humanware” que desarrolle los talentos adecuados para el crecimiento exponencial de la inteligencia educativa, pero tengo la percepción de que todavía estamos a tiempo..

Me hice una pregunta a la que no tengo respuesta: más allá de la cantidad de computadoras que se han regalado en Argentina en los últimos gobiernos, alguien me puede informar cuál es el porcentaje de “desconectados tecnológicos” que tenemos; que pasaría se esto supera el 40 %.

Los cambios abruptos han producido un disrupción en el sistema educativo, el cerebro aprende de la misma manera, por disrupción, los docentes que están capacitados en el uso de las tecnologías de educación deben repensar su rol y aceptar que pasaron de ser el conocimiento del aula a ser facilitadores del conocimiento en el aula, los docentes que no se han actualizado o capacitado, tienen la obligación personal de hacerlo, porque se supone que están haciendo algo que les gusta, es el emprender con el más hermoso de los emprendimientos: el conocimiento.

Este cambio debemos sustentarlo entre todos los actores del sistema social, cada uno desde su rol tiene que seguir evolucionando, de esta manera el sistema educativo, será sustentable, es decir, mejor que el anterior.

Inconcientemente estamos formalizando la educación informal y la no formal, queda en manos de quienes conducen los sistemas educativos de repensar la formalización de este para algunos nuevo, paradigma educativo, porque la educación presencial y la no presencial, ahora son una sola.

Lo esencial es invisible a los ojos, pero es sensible y lo percibimos interiormente en el alma, viva la vida, viva la educación.

Un paseo por las nubes y por la Neurociencia y la educación

La cuarentena nos obliga a estar en casa y todo lo que nos pasa, nos resulta extraño e inconcientemente todo el equipo cerebral hizo un repaso biológico de vivencias acontecidas en el pasado reflejadas en el presente con un prisma que supuestamente proyecta un nuevo futuro.

El estar en casa, nos obligó a repensar y compartir el día no solo con nuestra familia sino con un curioso invitado: el tiempo, es con él, que mientras los niños en su mundo de juguete miran TV o juegan con la tablets, los adultos y los adultos mayores compartimos inicialmente el temor en todos sus niveles y durante todo este tiempo compartimos la casa (oikos) denominada hogar; ese curioso invitado se instaló para hacernos notar su presencia y hacernos pensar en cómo pasarlo mejor, porque nos dimos cuenta que antes pasaba rápido pero ahora es un poco ….(pesado), sin darnos cuenta como en las viejas épocas todos jugábamos el mismo juego de antaño “Antón pirulero”, dónde cada cual atiende su juego y el que no, una prenda tendrá.

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